miércoles, 25 de junio de 2008

La voluntad de no morir

No sé si depende de ti, de tu voluntad o de la mía, de la nuestra.
Yo no quiero que te mueras, ni que te pasenada malo, ni de que sufras, nis siquiera que te preocupes.
Quiero que estés bien, tan bien como para pelear verbalmente contigo, despotricar con tus ideas y ensalzar la amistad frecuentada con el paso de los años.
Así que si de mi depende:
- rezaré al Dios cristiano.
- Convocaré a las estrellas del firmamente.
-Enviaré a pedir ayuda a las costelaciones.
- Pediré que el reki actue por las manos de quienes confío
- Hablare en el idioma de Alá, el de Confucio y el de Buda.
Rezaré sin fe, con desesperación, con miedo, con esperanza, con oraciones de siempre, con otras espontáneas... el caso es que no te mueras, que no te pase nada, que podamos pelear, discutir... que puñetas que pueda abrazarte entre lágrimas de alegría porque la vida nos regala: vida.
No te mueras, no te lo pido, casi casi te lo ordeno... auqnue tu no creas en hacerme caso.

domingo, 20 de abril de 2008

Siniestra Belleza

Me sorprendo leyendo... Siniestra belleza
"Una calavera de origen azteca con 8.601 diamantes perfectamente cortados y pulidos incrustados, obra del artista británico Damián Hirst, se exhibe en el British Museum. El coste de producción fue de 20 millones de euros, sufragados por el artista.- DAMIEN HIRST. ELPAIS -18-04-2008"
Quién puede tener ganas de cubrir una calabera con diamantes, recoger y pulir uno a uno para tallarlo en piedras preciosas y exhibirlo!!! Y no se que me sorprende más: si tallar una calabera, si gastar 20 millones de euros en diamantes o si ganarme la vida exponiendo estas cuestiones que llamamos "arte",
Ciertamente me parece siniestro, por el gasto, por la ostentación, por el maniquí y cómo no porque en la pagina del periódico ocupe más espacio que las calaberas que mueren en áfrica por hambre.

sábado, 19 de abril de 2008

Ahora podré descansar

Con el compromiso adquirido conmigo misma de asomarme así, diciendo mi nombre en voz baja.
Con el firme propósito de escribirme. de comprometerme a dejar salir las palabras que hierven dentro y se posponen esperando un espacio y tiempo para emerger a la superficie.
Así me voy a dormir.
Sabiendo que he empezado al trigésima tercera tarea inacabada de mi vida.
Mañana veré si esto era necesario.